"Hay hombres que luchan un dia y son buenos. Hay otros que luchan un año y son mejores. Hay quienes luchan muchos años y son muy buenos. Pero hay los que luchan toda la vida: esos son los imprescindibles". Bertolt Brecht

miércoles, 5 de marzo de 2008

HACIA UN NUEVO PERÍODO DE REALIZACIONES


Inauguración del XXXVIº Período de Sesiones Ordinarias de la Honorable Legislatura de la Provincia del Chubut

Señores Diputados.

Transitamos tiempos distintos.

Otro escenario es el que nos espera.

A ustedes para legislar.

A nosotros para gobernar.
Han pasado cuatro años desde que nos presentamos como una alternativa.

La gente nos creyó.
Nos votó.
Y nos puso en este lugar.

Nuestro compromiso iba más allá de promesas de campaña.
Traspasaba cualquier frontera que existiese entre la injusticia y la igualdad.

Acortar esas brechas injustas, vergonzantes, se convirtió en nuestro objetivo más sagrado.

Puedo decir, que en una obsesión.
No llegamos a este lugar para administrar el pasado.

Llegamos para construir el futuro.

Digno, esperanzado, creativo y seguro.

Y con igualdad de oportunidades.

Pero con memoria

Por eso en estos cuatro años hemos gobernado con la imagen fresca de la provincia que heredamos, para no equivocar el rumbo.

La provincia necesitaba un cambio rotundo.

No sólo de métodos, también de convicciones.

Y no sólo en la actitud de sus gobernantes: también en la de su gente.

Y la gente lo entendió.

Así, entre todos, pudimos llevar adelante un plan de acción que nos permitió desterrar de raíz viejas prácticas y viejos vicios.

Eso fue lo que encontramos.

Junto a un Estado que no podía dar las mínimas respuestas a las necesidades de sus legítimos dueños: los habitantes de la provincia.

Insisto en aquellas realidades.

NO hay que olvidar.

Los pueblos que olvidan su historia, están condenados a repetirla.

Por eso es bueno traer a este recinto algunas de aquellas cosas con las que nos encontramos.

Y que nos propusimos cambiar.

Tengamos memoria.

Fue en un acto de campaña, en 2003 cuando un nene pedía "quiero un trabajo para mi papá" en un cartel que para mi no pasó inadvertido.

Fue la primera señal.

Teníamos el 14 por ciento de la gente sin empleo.

Los comerciantes vivían la angustia de un mercado deprimido y un futuro incierto.

Eran más las persianas que bajaban que los comercios que sobrevivían.

No había insumo en los hospitales públicos.

La gente hacía cola para conseguir un medicamento que casi nunca estaba.

Y la condenaban a pasar horas a la intemperie para conseguir un turno para un profesional que casi nunca llegaba.

Recibimos un banco saqueado y usurpado.

No era de todos, sino de unos pocos.

También habían sido saqueados los jubilados con el mal llamado aporte solidario.

Un robo a sus bolsillos.
Recuerdo la cola de gente apiñada, a veces bajo la lluvia y el frío, buscando una bolsa de comida que revelaba la miseria del clientelismo.

La proliferación de comedores comunitarios que reemplazaban la mesa familiar.

Los hogares chubutenses bajo la línea de pobreza alcanzaban el 41 % y las familias indigentes superaban el 18 %.

El ejercicio de la memoria nos lleva a ver padres desesperados en las puertas de las escuelas luchando por un banco para su hijo.
No había ni escuelas ni bancos.

Y en algunos casos, tampoco docentes.

Recuerdo hace cuatro años, caminaba por el Máximo Abásolo de Comodoro, no había ningún edifico publico, de ninguna repartición oficial en una barriada de mas de 10 mil habitantes.

Aquí, como en casi toda la provincia, ese estado de unos pocos, se había olvidado de muchos.

Guardamos en la memoria una lista de penosas realidades como la de los productores agropecuarios engañados con la revolución productiva.

O la falta de agua y cloacas en la mayoría de los barrios humildes en todas las ciudades y pueblos de la provincia.

La desesperación en las pequeñas localidades del interior, olvidadas y sin futuro.

La angustia de las víctimas de la política de adjudicación de viviendas y la de los que transitaban caminos deteriorados por la falta de inversión.

En definitiva, la desesperanza de miles de ciudadanos que ansiaban otro destino para si y para sus hijos, pero que no encontraban las respuestas que querían y merecían.

Chubutenses que veían como la pobreza, la indigencia y la mortalidad infantil se convertían en una costumbre cotidiana que todos miraban pasar.

Que nadie atacaba.

Hay que tener memoria.

Por eso este repaso, por aquellas realidades, que encontramos y que nos propusimos revertir.
Un recorrido por la vieja provincia, la de las viejas prácticas y las viejas políticas.

Ya no están.

Y es responsabilidad de todos que no vuelvan.

Y no volverán.

Señoras y señores.
Diputados:

Nos encontramos con demasiadas urgencias.

Y las soluciones no debían ser parciales, sino definitivas.

Debían perdurar.
Y que en otros tiempos otras generaciones las disfruten.

Y en todo caso, las mejoren.

Pensamos desde el primer momento que la gestión debía nutrirse de decisiones políticas ágiles.
Concretas.
Y no dudamos, ni tardamos en tomarlas.

Una de ellas fue la decisión de dejar atrás la emergencia económica.

Una ley que durante años había obstaculizado el crecimiento de muchos sectores del Estado.
Fue una apuesta fuerte.

Una decisión necesaria.

Otro paso que dimos fue el de abrirle las puertas a nuevas generaciones.

Jóvenes con la inquietud de participar, de dar lo mejor.

Pero que siempre tropezaron con la falta de oportunidades.
Ahora las tienen.

Y el tiempo y los resultados están demostrando que no nos equivocamos.

También pusimos manos a la obra en desterrar para siempre la burocracia improductiva.

La que había caracterizado durante años al estado.

Un estado que había perdido su compromiso con la sociedad.
Con estos criterios, nos pusimos en marcha.

Nosotros, intentando los primeros esfuerzos para salir de la emergencia.

El pueblo, acompañando.

Fue vital para nosotros no sentirnos solos.

Pensar que detrás de nuestra responsabilidad había gente con las mismas ganas de cambiar.

Con la esperanza de vivir mejor.

Eso fue lo primero que nos propusimos: que la gente de Chubut recupere la fe.

Y lo conseguimos.

El trabajo y las convicciones fueron herramientas insoslayables para que lo logremos.

Y así, seguir adelante.
Vengo a esta casa a hacer un somero resumen de lo que hicimos.

Y a hacer hincapié en lo que haremos.

En qué vamos a centrar nuestros mayores esfuerzos.

Ya dije que nos importa más lo que viene.

Pero es necesario hacer un repaso de cómo comenzamos.

Porque allí está la raíz de los esfuerzos.

Y también de los resultados.
Encontramos una provincia en emergencia.

Casi sin aire.

En muchos lugares, las necesidades asfixiaban a rincones olvidados con habitantes sin esperanza.

Reparticiones y áreas del estado estaban devastadas por la desidia.

No me canso y no me cansaré cada vez que venga a esta casa, de hablar del Estado.

Porque por ahí pasan la mayor parte de las soluciones.

De las respuestas a las exigencias de la gente.

Si el estado funciona, si recupera el aire, si puede caminar por si solo, entonces también funcionará la sociedad.

Hemos logrado esa transformación.

Los resultados están a la vista.

Hoy exhibimos un estado con mayor eficiencia que puede dar respuesta en varios frentes.

Que tiene capacidad para incentivar y acompañar la producción, hacer crecer la obra pública y recuperar al recurso humano.

Que dejó atrás la emergencia.

Y ahora, le apunta al crecimiento.

Una nueva etapa que iniciamos.

Distinta. Sólida. Esperanzadora.

Porque en este segundo período comenzamos un proceso de transformación

Que no represente un antiguo mitigador de la pobreza.

Sino un moderno plan para el crecimiento.

Y esta es una diferencia cualitativa: limitarse a la mitigación o aspirar a una transformación, no pasa por la cantidad de recursos con que se cuenta para invertir, sino por la estrategia definida para aplicarlos.
En definitiva: nuestro plan de gobierno no aspiró ni aspira a acotar los problemas sino a solucionarlos.

Venimos realizando una transformación en escala que permita acompañar agendas de trabajo con resultados a corto plazo.
Una actitud de transformación es invertir en lo que el otro necesita.

Porque entendemos que es una de las formas de transformar su realidad y terminar con el viejo modelo que lo marginaba.

El nuevo modelo requiere de actitudes políticas e institucionales que faciliten el camino.

Y que se expanda a todos los sectores de manera articulada.

Hemos dicho más de una vez, que uno de nuestros primeros pasos fue terminar con el clientelismo político.
Vieja práctica demagógica que convertía al hombre en rehén de sus propias necesidades.

Ese manejo clientelar y ese estado de vulnerabilidad garantizaba que el pobre siga siendo pobre.

Con un valor agregado: de la manera más indigna.

Cumplimos el objetivo de acabar con ese retrato de la vergüenza, de dos maneras: aplicando una política insoslayable de inclusión y descentralizando el poder de reparto de los bienes del estado.
En este aspecto creamos la Tarjeta Social que alejó a los sectores más desprotegidos de tener que vivir de una mísera bolsa de alimentos secos.

Con su tarjeta, después imitada en varias provincias del país, tienen la facultad de comprar alimentos frescos para compartir en un lugar emblemático: la mesa familiar.

Señores Diputados

Con una política de promoción articulada entre Nación, Provincia y Municipios cerramos todos los comedores comunitarios.

Queremos igualdad de oportunidades para todos.

Queremos ser garantes de la existencia del acceso equitativo a las oportunidades.

Sin esa equidad, el reparto de las riquezas provinciales será desigual.
Y nos alejaremos del gran objetivo, el doctrinario: el de la justicia social.

A modo de ejemplo:

me referí al comienzo a la situación del barrio Máximo Abasolo, hoy podemos mostrar, cuatro años después, que lo dotamos de dos escuelas, una comisaría y un gimnasio próximos a inaugurar, un centro de salud y ya terminamos la ejecución del programa de mejoramiento barrial PROMEBA.

Con esta actitud de transformación continuaremos recorriendo esta nueva etapa, este nuevo mandato.

La gente nos confió un nuevo desafío.

Que encararemos con las mismas ganas.

Con la misma fuerza y la misma voluntad.

Porque vamos a gobernar hasta el último día de nuestro mandato.

Por si no quedó claro: vamos a gobernar hasta el último día de nuestro mandato.

Esta es la palabra.

La que venimos cumpliendo sin renunciamientos.

Haciendo de ella también una herramienta de trabajo.

Nuestra nueva agenda de las ocupaciones públicas tiene a partir de ahora, otros desafíos.
Está vinculada a alcanzar la excelencia de los servicios y a la consolidación del crecimiento.

Tiene la fuerza necesaria que le está dando el afianzamiento de un modelo de provincia y de país que recuperó la fe.

Pero no en base a palabras dispersas, sino en base a hechos concretos.

Hechos, no palabras.

Lo seguimos sosteniendo y afianzando.

Es la manera de decirles a los ciudadanos de Chubut que nuestro compromiso traspasa las puertas de los despachos oficiales.

Está en cada casa, de cada pueblo.

Está en las calles, en los barrios, en las escuelas, en los hospitales.


Y estaremos fundamentalmente donde haya un habitante de Chubut con sus necesidades básicas insatisfechas.

Lo dije hace algunas semanas en esta misma casa: hacemos esfuerzos igualitarios.

Apuntamos de manera especial a aliviar los dolores de lo que más sufren.

Allí están nuestros mayores esfuerzos.

También dije aquí, ante ustedes aquella frase del filósofo cubano José Martí.

Y resulta oportuno repetirla: "Es preferible el bien de muchos a la opulencia de pocos".

Les expresé al principio que otro escenario nos espera: a ustedes para legislar y a nosotros para gobernar.

De estos deberes institucionales no puede ser ajeno el otro poder del Estado: la Justicia.

Mucho se ha debatido en estos años y también en estos últimos días, sobre la inestabilidad de sus decisiones.

No lo digo como una referencia personal.

Lo dice la gente.
La que se siente perjudicada y reclama una intervención más severa.

Recorremos las calles permanentemente.

En esas recorridas, palpamos el pensamiento de muchos hombres y mujeres, algunos de ellos víctimas de delitos.

Que ven como muchas veces el policía detiene a los mismos delincuentes.

Y el policía también siente el hartazgo.

Porque tiene una pelea cotidiana y desigual.
Detiene al ladrón y la justicia lo suelta.

Se quejan que hay testigos y personas que fueron hostigados para que no declaren.

Y paradójicamente esto se ha dado desde dentro del ámbito judicial.

Que esperan la presencia judicial, allí donde fueron los hechos.

O que se resuelve la situación procesal del detenido, antes que les tomen la declaración del delito del que han sido victimas.

Por esa gente es que debemos instar a la justicia a sellar un compromiso intangible con la sociedad: darle las respuestas que la sociedad requiere.

Una mejor justicia ayudará a construir una mejor sociedad.

Desde el Poder Ejecutivo hemos puesto no sólo la voluntad sino también acción y decisiones para luchar contra la delincuencia.

Invertimos durante 2007 casi 7 millones de pesos en nuestra policía.

Dinero que se utilizó para la compra de mejor equipamiento y tecnología más moderna.

También incorporamos 300 nuevos efectivos.

Y tenemos la voluntad de continuar fortaleciendo la capacidad operativa.
Y realizar aquellos cambios que nos permitan una mejor, más eficiente y confiable intervención policial en toda la provincia.

En el marco de estos cambios, vamos a modificar la legislación vigente sobre la vida interna de la fuerza.
Queremos más rapidez a la hora de castigar a aquellos que, desde el desarrollo de su actividad policial, cometen un delito imperdonable: el de apañar a los delincuentes o convertirse en uno de ellos.

Lo vamos a hacer en honor a los miles de buenos policías con los que hoy cuenta la fuerza.

Y también en homenaje a quienes perdieron la vida defendiendo los intereses de la comunidad.

El homenaje eterno para el Cabo Carlos Omar Corzo, para el Sargento Pablo Andres Rearte y el Sub Oficial Mayor Oscar Iberico Cruzado

No puede haber voces discordantes en la reprobación de estos hechos.

Tenemos la necesidad de buscar más que nunca la justicia y la verdad para ponerlas al servicio de la paz.

Y hay que rogar a Dios, no sólo por quienes murieron: también por aquellos que los sobreviven y que sufren todos los días sus ausencias.

Como lo hacemos en todos los temas, en el de la inseguridad, tampoco nos sacamos el sayo.

Sabemos de nuestras responsabilidades, de nuestras deudas.

Y las asumimos.

Porque es la única manera de poder saldarlas.
Nosotros pensamos que todo se construye desde abajo.

Desde el comienzo.

La prevención ayuda a formar mejores hombres y mujeres para el futuro.

Significa alejarlos de los sectores perniciosos que los desvían hacia prácticas delictivas.

Voy a dar un ejemplo: el trabajo que realizamos en el COSE.

Tenía en promedio una veintena de chicos.

Hoy bajó notablemente.
Funcionarios judiciales que lo visitaron se sorprendieron gratamente por sus instalaciones y los programas de reinserción que pusimos en marcha.

Es un aporte más que sentimos como una obligación del estado y un derecho de la sociedad.
Pero sentimos que ese esfuerzo se desvanece si la justicia aloja a menores por períodos cortos.

El promedio del 2006 expone que más de 55% de los menores fueron alojados menos de 10 días cada uno.

Entonces la intervención genera sólo un pequeño remedio.

Señores diputados:

Los que pasaron fueron cuatro años que comenzaron a dar vuelta la historia.

Dijimos desde siempre que se puede cambiar.

Y se puede desde la contracción al trabajo, la voluntad y el esfuerzo.

Por eso podemos exhibir realidades.

Cambios que ayudaron a mejorar la vida de los ciudadanos del Chubut.

No resultó una tarea fácil dejar atrás frustraciones y desengaños.

Promesas incumplidas, deudas históricas.

Había que empezar de nuevo.

Y lo hicimos con rigurosidad.

Pero no sólo pensamos en el presente inmediato sino también en el futuro que nos espera.

Para no abrumarlos con números y datos, voy a destacar los hechos y acciones más salientes de estos cuatro años de gestión, acompañándolos con hechos y proyectos para el futuro.

Considero importante destacar la iniciativa de Chubut en lo que hace a la energía.

El país está soportando una crisis importante derivada de su crecimiento.

Desde la Patagonia, como lo hacemos con otros recursos, buscamos caminos no sólo para afrontar nuestros propios problemas.

También para ayudar a resolverlos a nivel nacional.

Así nació el proyecto Ingentis.

Una innovación en la asociación del Estado con sectores privados para generar energía suficiente.

No sólo para nosotros.

También para los demás.

Esto nos permite además un mayor valor agregado energético a nuestras regalías gasíferas.

La provincia tendrá un capital social del 39 por ciento.

Los proyectos Ingentis I y II ya están en marcha.

El que se construye en Dolavon generará 500 megas, incluyendo un parque eólico que tendrá una generación propia de 100 megas.

Ya existe un compromiso de venta a 14 empresas de primer nivel, con una facturación anual prevista de 190 millones de dolares.

La inversión total es de 509 millones de pesos de los cuales la provincia aportará el 39 %.

Ingentis II será construido en Esquel.

Tendrá una central que generará 100 megas, la inversión estará cercana a las 200 millones de pesos y una facturación anual estimada en los 50 millones de dolares.

De esta manera, se consolida la participación del Estado Provincial en el sector energético y se plasma definitivamente una alternativa productiva regional, contribuyendo a un desarrollo económico sustentable y equitativo.

No debemos olvidar otros pasos gigantescos que la provincia, con la inestimable ayuda de la Nación dio en materia de energía: la construcción de la línea de 500 kilowats, tan ansiada, tan necesaria.
Y tantas veces prometida.

Se construyó.

De la mano del compromiso del gobierno nacional.

Con la decisión política del entonces presidente Néstor Kirchner.
No puedo dejar de mencionar la construcción definitiva del Gasoducto Patagónico que dignificó la vida de miles de familias.

Fue otra decisión que tomamos sin titubear.

Sabíamos que en estas latitudes, el gasoducto no representaba sólo una obra necesaria: era imprescindible.

Lo hicimos con la ayuda y el esfuerzo de todos y cada uno de los chubutenses.

Ahora quiero referirme a un tema que generó la reacción de algunos sectores pero que en poco tiempo nos indicó que habíamos tomado el camino correcto: la renegociación de los contratos petroleros.

Chubut fue pionera en el país.

Dio el primer paso hacia la seguridad para los trabajadores y la previsibilidad para los empresarios.

A partir de la sanción de la ley 26.197, seguimos adelante con las negociaciones iniciadas con la empresa Pan American Energy y firmamos una renegociación que fue acompañada por las cámaras del sector, los trabajadores y sus sindicatos.

Y por la Legislatura, que lo aprobó en forma casi unánime: 23 de los 27 diputados le dijeron si.

El otorgamiento de la nueva prórroga a la concesión por 10 años permitirá ingresos al Estado Provincial por 778 millones de pesos.

Y en 2027 los hidrocarburos volverán a ser administrados por la provincia.

Esta firma dio por tierra con los anuncios más agoreros.

A los pocos meses y gracias a la firma de la renegociación se hizo público el descubrimiento de un nuevo yacimiento que prácticamente duplicará la actividad petrolera de la provincia.

La exploración y hallazgo se hizo en el marco del acuerdo que firmamos con Pan American Energy y representa un reaseguro al futuro empresario y de los trabajadores.

Y también de la provincia.

Señores diputados: este gobierno pone la firma de manera responsable y sólo donde sabe que los réditos beneficiarán al conjunto de la sociedad.

Estos son hechos que lo demuestran.

Y que contribuyen a afianzar la credibilidad de la gente en sus gobernantes.

Hace pocos días firmamos un convenio histórico con ex trabajadores de YPF.

A través de un fondo fiduciario, en el que intervino el Banco del Chubut, le pagaremos el 40 por ciento de un juicio histórico.

Nos convertimos en la primera provincia en realizar este esfuerzo como reconocimiento a los ex ypefianos y también para terminar con una larga espera, convertida en una espera injusta.

La política en materia de SALUD formó y forma parte insoslayable de los días de este gobierno.
¿Qué hicimos?

Primero atacar las urgencias y terminar con las situaciones más vergonzantes: falta de medicamentos en los hospitales, ausencia de infraestructura mínima y limitación de los recursos.

Después trabajamos sobre la salud y no sobre la enfermedad con programas de prevención, incorporación de profesionales y la ejecución de programas sanitarios provinciales y nacionales.

Hicimos 45 obras nuevas, refaccionamos otras 17 y ampliamos 49.

El 90 por ciento de las nuevas estructuras pertenecen a centros de salud y puestos sanitarios.

Una manera de acercar la salud a la gente.

Se incorporó personal, en su mayoría profesional y se invirtieron sumas millonarias en la compra de vehículos e insumos médicos.

Y no puedo soslayar la puesta en marcha de programas itinerantes para poblaciones dispersas, programas de salud visual, mental, escolar y deportiva.

Todos tienen derechos a la salud.

Por eso uno de los resultados que más nos enorgullece es el haber bajado la mortalidad infantil, que tanto nos dolía y avergonzaba, del 13,7 por mil en el 2003 a solo 10 por mil al fin del año 2007.

Por eso, la atención de la salud llegó a todos.

Si decimos que en esta gestión el presupuesto educativo fue aumentado el 220 por ciento estamos diciendo otra vez que para nosotros la educación es una cuestión de estado.

Podría llenar de datos este discurso.

Pero voy a referirme sólo a algunas cuestiones que tienen un valor agregado: la recuperación de instrumentos educativos que se habían perdido y la creación de otros, para que el saber llegue a cada rincón, sin exclusiones ni excluidos.

Es un orgullo decir que al día de hoy existen 158 obras escolares en ejecución con una inversión de más de 100 millones de pesos.
Que el presupuesto nos permitió extender y optimizar la oferta en el nivel inicial entendiendo que la necesidad de escolarizar a los niños de 3,4 y 5 años es una forma de garantizar una posterior trayectoria escolar exitosa.

Por eso se logró la cobertura universal de la sala de 5 años con una matrícula que superó los 8 mil alumnos y se incrementaron en 2.723 las vacantes para salas de 4 y 1.116 para salas de 3 en relación al año 2003.

Recuperamos la escuela de jornada completa a partir de 2006, que había sido suspendida por la ley de emergencia económica y creamos 8 escuelas especiales, además de varios colegios para el nivel secundario.

Mejoramos el salario docente a través de las paritarias que también discutimos con otros sectores de trabajadores del estado.
En el área de la educación, pusimos justicia en cuanto a los concursos docentes.

Esto se potenció en 2006 cuando concretamos el concurso de ingreso a la docencia y a la titularización de bibliotecarios y profesores, con un total de 18.684 horas cátedra.

Esto implica que 1.144 docentes han logrado su estabilidad laboral después de 17 años.

Con el esfuerzo de todos y en beneficio de los alumnos superamos con creces los 180 días de clase.
Tenemos conciencia que todas las acciones de la política educativa necesitan de un factor fundamental: la exigencia de la enseñanza y la voluntad del aprendizaje.

Finalmente, quiero detenerme en un par de datos: esta administración creó 17 nuevos centros para adultos, especialmente en localidades pequeñas como Lagunita Salada, El Mirasol, Lago Blanco y Yala Laubat.

Una escuela para jóvenes y adultos, y 4 servicios en dos escuelas, una empresa y un sindicato.
Por otro lado y a través de un programa nacional, dotaremos de computadoras a todas las escuelas rurales y de frontera.

Las experiencias en Sarmiento y en la Aldea Atilio Viglione han sido por demás positivas.

Entonces, seguiremos adelante.

Siempre sostuvimos que todos tienen derecho a la educación.

Por eso, la educación llegó a todos.

Puedo decir a manera de resumen que en estos últimos 4 años se entregaron 10.561 soluciones habitacionales con una inversión de más de 600 millones de pesos.

Se encuentran en marcha otras 6.272 viviendas

El presupuesto de este año del Instituto Provincial de la Vivienda es de 347.825.293 pesos.

La frialdad como la contundencia de los números nos eximiría de mayores comentarios, pero las políticas que hemos implementado en materia de viviendas es para nosotros motivo de orgullo.

Entendemos que el techo propio no sólo dignifica: también une a la familia.

Por eso hemos implementado la entrega de llaves los días domingo, para que sea la familia completa la que la reciba.

Y pueda compartir ese momento inolvidable del cual, muchas veces injustamente, han sufrido una larga espera.

Quisimos dar solución a un sector postergado y excluido de la consideración del Estado.

Heredamos un tremendo déficit habitacional pero no nos resignamos.

Por eso, implementamos un plan de inversiones que permitió un volumen de respuesta que no tiene antecedentes en la historia de esta provincia.
El Promeba nos permitió refundar 27 barrios en las principales ciudades.

Para ello invertimos 230 millones de pesos.

De esta manera, 17 mil familias accedieron a una mejor calidad de vida.

Las viviendas sociales, dirigidas a los sectores más carenciados fueron otros de los ejes principales de nuestras políticas: entregamos 6.461 con una inversión que superó los 500 millones de pesos.

El programa Mejor Vivir destinado a resolver la problemática de las casas precarias,
las viviendas tuteladas para nuestros mayores,
las de servicios, destinadas a fortalecer y acompañar la expansión de las áreas de seguridad, salud y educación sobre todo en el interior,
formaron parte de este trabajo de 4 años.

No nos olvidamos de las personas con capacidades diferentes.

Tienen los mismos derechos.

Por eso también tuvieron sus techos propios.
Dije hace cuatro años desde este mismo lugar que para nosotros, el deporte no representaba sólo un instrumento de recreación.

Y que nos daba vergüenza comprobar que en el área de cultura la provincia invertía 50 centavos por habitante por año.
Nos pusimos a trabajar intensamente.

Convertimos al deporte en un instrumento social, capaz de generarles a los jóvenes alternativas distintas que los alejen de otros entretenimientos perniciosos.

Colocamos a Chubut en un lugar competitivo, otorgandole al deporte el apoyo que hasta ese momento no tenía.

En este sentido hemos otorgado casi 400 becas con una inversión de más de 3 millones de pesos.

Y más de 4 millones se invirtieron en viajes, alojamiento, alimentación, indumentaria deportiva y logística.

Hubo ayuda para innumerables entidades deportivas y se construyeron albergues, gimnasios, piscinas cubiertas, playones deportivos, circuitos de salud, tribunas, pistas de atletismo y canchas de hockey.

El trabajo también se vio reflejado en la excelente actuación de nuestros atletas.

Podemos exhibir los resultados obtenidos en los juegos de la Araucanía.

En los últimos cuatro años Chubut obtuvo dos veces el primer puesto.

El nivel alcanzado en los Juegos Evita es otra clara demostración de ese crecimiento deportivo.

La creación del ente Chubut Deportes significó mayor independencia y participación.

Esa fue la intención y en ese camino estamos.

Modificamos en cuatro años una triste realidad cultural.

Y continuaremos aportando al crecimiento de nuestros hacedores culturales porque creemos en ellos y porque la provincia los necesita.

No es la cultura un privilegio de pocos.

Debe ser la expresión de todos aquellos que la sienten.
Aumentamos notoriamente el presupuesto.

Creamos un fondo editorial y de fomento económico, otorgamos becas y pasantías, apoyamos las fiestas populares y a los municipios y comunas rurales.

La gestión diseñó un plan cuatrianual, lo que constituye un hecho inédito para el área, buscando proyectar una política cultural acorde a la realidad de la provincia.

Sostuvimos siempre, desde el primer minuto de gestión que para nosotros no hay diferencias entre los pueblos.
Todos son iguales a la hora de definir nuestras acciones.

Por eso, los queremos unidos.
Unos a otros.

Y que mejor, que haciendo rutas, puentes y caminos.
El trabajo de Vialidad Provincial es una prueba de estas convicciones.

A lo largo de la gestión hemos encarado la construcción de 533 kilómetros de pavimento, de los cuales 122 están finalizados y 411 están en ejecución.
Iniciamos la construcción de 42 puentes y pasarelas.

Ya están habilitados 19, con una inversión de más de 33 millones de pesos.

Hemos hecho 523 kilómetros de enripiado en lo que invertimos 26 millones y en cuanto a la red de rutas nacionales entre obras nuevas y reconstrucción la inversión supera los 850 millones de pesos.

No son cifras menores.

Y es el resultado de nuestra intención de unir a los pueblos, a la gente, a través de mejores caminos.

Así podemos con enorme orgullo, ir haciendo un corto repaso de nuestras acciones, cuyas especificaciones completas encontrarán ustedes, diputados, en el anexo de este discurso.

La regularización de tierras a través del IAC, entregando títulos por más del 44 por ciento de las tierras escrituradas en los últimos 50 años poniendo sobre todo justicia en lo que hace a las postergadas comunidades aborígenes.

El destino del dinero que recauda lotería y que vuelve a la gente.

A lo largo de la gestión se recaudaron y administraron 275 millones de pesos, de los cuales 135 millones volvieron a miles de apostadores por medio del pago de premios y destinaos 17 millones a una distribución equitativa y coordinada con el ministerio de educación y las secretarías de cultura y deportes.

Y las acciones emprendidas y concretadas a través del Instituto de Seguridad Social y Seguros con más y mejores servicios para sus afiliados tanto en salud como en recreación son algunas de las concreciones que no quería dejar pasar por alto.

Como la devolución del 13% histórico y la movilidad de los haberes de los jubilados del estado.

Pero creo que la mayoría de los actos de gobierno se ven y se palpan cada día, con cada habitante y en cada lugar de este extenso territorio.

Quise dejar para el final algunos hechos que han pasado durante esta gestión.

A través del período que pasó, pero sobre todo durante el año pasado Chubut consolidó su presencia a nivel internacional.

La apertura de la Casa del Chubut en París fue un paso adelante.

Se convirtió en el eje movilizador de las inquietudes de productores y emprendedores que no esperan una dádiva del estado.

Salen a buscar sus propias oportunidades.

Por eso el Estado les brinda el apoyo que necesitan.

Hemos participado en 68 eventos comerciales fuera del país.

El 46 % de nuestros productores y emprendedores que concurrieron concretaron sus negocios.

Para nosotros, el sector productivo resulta clave para el desarrollo económico de la provincia.

Por eso, una medida que tomamos fue diversificar la tarea del ex ministerio de la Producción para hacerlo más ágil y más moderno.

Así nacieron los ministerios de Comercio Exterior, Turismo e Inversiones y el de Industria, Agricultura y Ganadería.

Más libertad de acción y decisión en áreas productivas clave.

Nuestro plan de acción apuntó a la radicación de proyectos industriales, turísticos y comerciales.

Y a intensificar el trabajo y la gestión pública en forma conjunta con los sectores privados para ubicar a Chubut y sus productores en un lugar de privilegio en el comercio internacional.
La aplicación de esta política gubernamental permitió consolidar el perfil exportador ubicando a Chubut en el cuarto lugar del ranking de provincias exportadoras.

Aquí el rol de nuestro Banco Provincial, saneado, competitivo y modernizado resulta clave.
No solo como una herramienta accesible en el financiamiento, apoyo y asesoramiento de nuestros productores.

Ahora también se sumara a nuestra política de salir al mundo: en los próximos meses el Banco del Chubut tendrá una representación permanente en las oficinas de la Casa del Chubut en Paris.

A modo de resumen permítanme decirles cual es su situación con solo algunos indicadores.

Contamos hoy con 90 líneas de crédito por las cuales se realizaron 51.000 operaciones crediticias por mas de 600 millones pesos.

Redujimos la morosidad del 84% a comienzos del 2004 a solo el 4% en la actualidad.

Exhibiendo con orgullo que la rentabilidad es del 39,2% mientras que en el promedio del sistema financiera la misma es del 11,95%

Además, tomamos decisiones importantes para el fomento del turismo, otra fuente de ingreso inagotable que ha crecido y estoy seguro, seguirá creciendo.

Pero de nada servirá esa apuesta, si no se mejoran los servicios.

Un mejoramiento que debe llegar de la mano de la inversión privada.

El Estado está haciendo lo suyo en el plano de la difusión, promoción, el mejoramiento de caminos y la infraestructura que le es propia.

Hace falta conjugar ese esfuerzo con los empresarios del sector que en el corto plazo se verán absolutamente beneficiados.

He expresado públicamente que la conjunción educación y trabajo es el camino a seguir en el futuro inmediato.

En el ámbito laboral podemos exhibir un crecimiento de la población ocupada del 44,6% respecto del 2003, con la creación de mas de 32.318 nuevos empleos registrados y 2.442 empresas nuevas

Para consolidar estos resultados como política de estado, elevaremos a esta cámara el proyecto de creación del Consejo de Investigación, Trabajo, Educación y Producción.

El objetivo es gestionar, articular y conciliar intereses entre, las actividades productivas y las oportunidades laborales.

Además, hace algunas semanas anunciamos la creación de la Universidad Provincial.

Es nuestra mejor apuesta al mañana.

No tratamos de competir, sino de mejorar.

Y sobre todo, de darle a los jóvenes igualdad de oportunidades.

Con la nueva universidad la tendrán.
Estoy seguro.

Vamos a formar técnicos y profesionales universitarios en nuestro propio territorio, solventando desde el estado la mejor de las inversiones.

Señoras y señores: en educación y formación, lo que abunda no daña.

No puedo dejar de mencionar lo que para nosotros también es una cuestión de Estado: el cuidado del medio ambiente.

Un área que jerarquizamos y en la que hemos puesto toda la energía.
Basta con recordar que en 2003, cuando asumimos el presupuesto total del área era de 177.791 pesos.

En 2007 superó los 7 millones.

En 2003 se habían realizado 3, reitero tres inspecciones.

En 2007 superamos las mil.

Daré una muestra de nuestro compromiso.

Y también el de la sociedad chubutense y sus instituciones.

El 26 de diciembre un importante derrame de petróleo castigó la costa de Caleta Córdoba.

En conjunto, atacamos dos frentes: el de resolver el problema primero, el de castigar a los responsables después.

Con la intervención del gobierno nacional, entidades ecologistas, el municipio y nuestro gobierno atendimos la emergencia con rapidez.

Se evitó que la mancha prosperara e hiciera más daño.

Y por sobre todo, se salvó la vida de miles de aves y mamíferos marinos.
La fauna que resultó afectada fue convenientemente tratada y devuelta al mar.

Solucionando en parte el problema ambiental, buscamos a los responsables.

La Justicia Federal dio una prueba de eficiencia: en dos meses llevó al banquillo a cinco imputados.

La causa tiene 9 cuerpos y 2000 fojas.

Y va camino a esclarecerse.

Será una sanción histórica que no terminará en el fuero penal.
La seguiremos con una demanda civil.

Si la justicia nos da la razón, esos fondos servirán para reparar el daño causado.

Serán destinados a la gente de Caleta Córdova para que recupere lo que nunca debió perder: su derecho a vivir en un ambiente limpio y sano.

Ahora quiero transmitirles un anuncio

Me comunicó la Señora Presidenta de la Nación Cristina Fernández de Kirchner, que para los festejos del bicentenario de la Revolución de Mayo, Chubut será sede de todas las actividades conmemorativas referidas a las temáticas de Medio Ambiente y de manejo de los Recursos Naturales.

Quiero decirles que cuando hablo de la segunda colonización, no me refiero a una quimera.

Los hechos descriptos como la matriz de producción de energía, la infraestructura, las obras hídricas, la agricultura de exportación, el turismo de todo el año son una prueba de ello.
La definición de nuevas matrices productivas, que vienen de la mano del manejo responsable de nuestros recursos naturales, se apoya en una clara política de preservación, uso sustentable y aumento de los mismos

Allí ponemos el acento en el cuidado de nuestro litoral marítimo donde, como nunca, hemos favorecido la previsibilidad de la actividad pesquera y la firmeza a la hora de preservar el caladero.

Estamos además terminando el proyecto de creación del Instituto del Agua, futuro ente rector de las políticas de estado en materia de un recurso que ganara en importancia estratégica y que esperamos tome estado parlamentario pronto.

También vendrá a esta casa, para su debate, la idea de desarrollar en una provincia generadora de energía la necesaria conformación de una Empresa provincial, a través de la cual no solo el estado pueda intervenir en la generación sino además ser un rector de políticas en la materia.

Es importante destacar, debido a hechos de trascendencia nacional reciente, nuestra política de bosques.

No solo trabajamos en la preservación de la masa de especies autóctonas, sino que hemos logrado incrementar las áreas forestadas y reforestadas de bosques nuevos implantados.

Y un dato que no es menor, constituimos brigadas de lucha contra los incendios forestales permanentes.

Capacitamos constantemente el recurso humano y los equipamos debidamente.

Entonces permítanme que utilice esta tribuna para agradecer primeramente a todos los brigadistas y nuestra defensa civil.

En segundo lugar a las fuerzas de seguridad, medios de comunicación y ciudadanos anónimos que pusieron compromiso y ganas para luchar contra el fuego devastador, en este temporada de prolongada sequía y altas temperaturas.

Creo que por lo expresado y por lo que hemos hecho, la gente busca en Chubut su nuevo destino.

La inmigración interna y externa, que en algunas ciudades ha superado cualquier expectativa, demuestran que esta provincia se ha convertido en un lugar digno para vivir.

En esos hechos y en los que vendrán está la definición de una nueva provincia que pueda ser disfrutada por nosotros y por las nuevas generaciones.

Obras fundamentales y fundacionales van camino a hacerse realidad.

Y no cesaremos hasta concretarlas, hasta hacer de Chubut la mejor provincia.

En la que no queden deudas pendientes.

En los últimos tiempos, Chubut ha sido permanente foco del país y del mundo por su abordaje al tema de los derechos humanos.

El año pasado se concretó el acto de reparación histórica más importante de nuestro pasado reciente: la inauguración del Centro Cultural de la Memoria en el recuperado aeropuerto viejo de Trelew.

Fue en homenaje a las víctimas de los fusilamientos ocurridos en la Base Zar el 22 de agosto de 1972.

Hoy, este hecho está buscando justicia.

Desde el juzgado federal de Rawson se ha trabajado con absoluta responsabilidad para esclarecer la masacre ocurrida hace más de 35 años.
Y castigar a sus culpables.

Nosotros no nos confundimos.

Conocemos la historia.

Quienes estaban de un lado y quienes del otro.

Decimos hoy que aquellos marinos que dieron inicio al terrorismo de Estado en la Argentina tendrán seguramente el derecho constitucional a un juicio justo.

Ese derecho que los muertos de Trelew no tuvieron.

Estamos siempre del lado de la ley y nunca del lado de las balas.
Hoy se está ventilando la verdad.

Y si hay culpables, habrá castigo.

Señores diputados, pueblo de Chubut.

En el ejercicio de esta responsabilidad, no pretendo encarnar las ilusiones ajenas.

Si, ser solidario con los sueños de los demás.

Trabajamos con un solo compromiso: lograr que el pueblo asuma la ilusión de tener una vida propia, libre y esperanzada.

Es posible otro destino que el vivir a merced de la limosna del estado.

La justicia social existe y por lo tanto es una práctica que no sólo vamos a defender: también la seguiremos ejerciendo.

Permítanme ahora, recordar una frase del creador del llamado realismo mágico, el escritor colombiano Gabriel García Márquez.

Cuando hace 25 años le dieron el Premio Nobel, dedicó buena parte de su discurso a las injusticias y las desigualdades en América Latina.

En uno de esos párrafos, dijo:"Nos sentimos con el derecho de creer que todavía no es demasiado tarde para emprender la creación de la utopía contraria.
Una nueva y arrasadora utopía de la vida, donde nadie pueda decidir por otros hasta la forma de morir.

Donde de veras sea cierto el amor y sea posible la felicidad, y donde las estirpes condenadas a cien años de soledad tengan por fin y para siempre una segunda oportunidad sobre la tierra".
Diputados, pueblo de Chubut:

Por ese camino andamos.

Y estamos convencidos que vamos a llegar.

Muchas gracias.